lunes, 1 de diciembre de 2025

Empezando diciembre

Empiezo diciembre con ganas de leer pero con poco tiempo para hacerlo.

Como os comenté en la entrada de octubre me traje de la biblioteca Los nombres epicenos de Nothomb y La hojarasca de García Márquez, que me han encantado los dos, sobre todo el de García Márquez pero el de Nothomb también tiene su miga. Ya os contaré con más detalle porque estoy escribiendo sus reseñas.

Estos días, quiero leerme alguno de los libros que compré en la Feria del Libro de Sevilla de este año. Son cortitos, así que me vienen perfectos. Os dejo de que van por si no los conocéis.



Desplazar el silencio - Etel Adnan

«El tamaño del futuro no es más largo que este callejón. Y las preguntas caen y decaen. Pero pasar junto a una cañada, ver que ha bajado la marea y observar cómo los patitos siguen a su madre en busca de la cena es un camino seguro hacia algún tipo de iluminación».

Este libro rompe el tabú acerca de escribir y hablar sobre la propia muerte. En párrafos breves e implacables, la pintora, escritora y poeta libanesa Etel Adnan, que cuenta noventa y cinco años cuando lo escribe, aborda la magnitud de su vida y reflexiona sobre el envejecimiento y la certeza de su extinción. Lo personal se proyecta sin cesar hacia afuera a través de reflexiones atravesadas por el territorio y el paisaje: la catástrofe climática, la guerra en Siria, las misiones a Marte o la contemplación del cielo y el mar. Reflexiones que, puestas en conjunto, componen una conmovedora interacción —a menudo dolorosa— entre lo íntimo y lo cósmico, en la que afloran una y otra vez los mismos símbolos terrenales que pueblan la pintura de Adnan. Desplazar el silencio es una meditación sobre la experiencia universal de enfrentarse a la muerte escrita con la gracia, la madurez y la sabiduría de una mujer que dedicó su vida al pensamiento y al arte.




Los sueños de diez noches - Natsume Soseki

Al soñar accedemos a una nueva visión de nuestra historia, inalterada por los dictados de la conciencia: aparecen diluidas las exigencias de la razón y toman la palabra, sin orden ni concierto, los deseos, los temores, la memoria… En este relato, Sōseki se interna en el territorio de lo onírico trasladando al papel la materia de sus sueños, y cuanto esta nos revela sobre su vida y la realidad de su tiempo.

Desde sus grandes novelas hasta sus relatos más breves, Sōseki demuestra la inconfundible calidad literaria de su prosa


Y vosotros, ¿qué estáis leyendo ahora?