La
contraportada
Sus
días de banquero pertenecen al pasado. Ahora, Laurent Letellier es
el feliz propietario de una pequeña librería parisina. Cuando una
mañana, camino del trabajo, se topa con un bolso de mujer abandonado
sobre un cubo de basura, decide llevárselo a la tienda con la noble
intención de devolverlo a su dueña. Desaparecidos el billetero y el
móvil, su propósito parece casi imposible si no fuera porque, entre
diversos objetos femeninos, Laurent encuentra una libreta roja llena
de anotaciones, pensamientos y recuerdos.
Cediendo
a la curiosidad, se sumerge en la jugosa lectura y, como si de un
rompecabezas se tratara, empieza a reconstruir la vida de Laure,
amparado por la excusa de hallar alguna pista que le permita
localizarla. Sin embargo, para qué engañarse, el diario también es
una llave a la intimidad de la enigmática desconocida, lo que ejerce
sobre Laurent una irresistible fascinación.
Mi
opinión
Hoy
os traigo al blog la reseña de un libro lleno de encanto y
casualidades con la ciudad de París de fondo.
Laure
es atracada en
la puerta de su casa mientras
busca las llaves. En el forcejeo recibe un fuerte golpe en la cabeza
que la deja mareada, mientras ve como el ladrón huye llevándose su
bolso.
Al
día siguiente Laurent
sale de casa con la intención de tomarse un café antes de empezar
su jornada laboral al frente de su librería Le
Cahier Rouge.
Al pasar junto a unos contenedores de basura le llama la atención un
bolso en color malva con cierres dorados colocado encima de una tapa.
Como estaba tan nuevo pensó que lo más probable era que alguien
hubiera sufrido un robo, lo cogió y se dirigió a la comisaria de
policía. Estando en la sala de espera le dijeron que tendría que
esperar más de una hora así que pensó dejar el bolso en su piso y
volver al día siguiente.
Cuando
terminó de trabajar no pudo resistir la curiosidad y abrió el
bolso. El contenido era de lo más variado: un frasco de perfume, un
manojo de llaves, maquillaje, caramelos de regaliz, un libro dedicado
de Patrick Modiano y una libreta roja tipo moleskine con anotaciones
de Laure, la propietaria del bolso.
A
partir de ese momento Laurent no puede dejar de buscar a Laure a
través de los objetos de su bolso, una búsqueda que afectará sin
remedio a su día a día.
El
autor
nos
traslada a París,
con sus cafés, sus librerías, sus calles y su ambiente entre
melancólico y romántico, sin duda el lugar ideal para esta
historia. Una historia que empieza con el encuentro casual de Laurent
con el bolso robado de Laure. Una casualidad de la que se sirve al
autor para ir desgranando algunos detalles de la vida de los dos
protagonistas, unas vidas no muy felices la verdad. Acompañándolos
están los compañeros de la librería, el escritor Patrick Modiano,
Chloe, la hija de Laurent, William amigo de Laure y dos secundarios
de lujo Belphegor y Putin, los gatos de los protagonistas que también
intervienen en esta historia.
Antoine
Laurain
no solo consigue trasladarnos a la capital francesa en menos de
doscientas páginas también contar una
historia llena de encanto, detalles emocionantes, un toque
detectivesco y algo de romanticismo.
Una de esas novelas que te dejan un buen recuerdo una vez la
terminas. Un saludo y buenas lecturas.
El
autor
Antoine
Laurain nació en París a principios de los años setenta. Tras
estudiar cine, empezó su carrera dirigiendo cortos y escribiendo
guiones. Su pasión por el arte lo llevó a trabajar como asistente
de un anticuario en París, experiencia que inspiró su primera
novela, Ailleurs si j#y suis, que obtuvo el Premio Drouot en
2007. Le chapeau de Mitterrand, que publicó en 2012, fue
aclamado de forma unánime por la crítica y el público en Francia y
obtuvo numerosos premios. La mujer de la libreta roja, su quinta
novela, lleva vendidos más de cuarenta mil ejemplares y está en
proceso de traducción a quince idiomas.