El abuelo que saltó por la ventana y se largó - Jonas Jonasson

La contraportada

Momentos antes de que empiece la pomposa celebración de su centésimo cumpleaños, Allan Karlsson decide que nada de eso va con él. Vestido con su mejor traje y unas pantuflas, se encarama a una ventana y se fuga de la residencia de ancianos en la que vive, dejando plantados al alcalde y a la prensa local. Sin saber adónde ir, se encamina a la estación de autobuses, el único sitio donde es posible pasar desapercibido. Allí, mientras espera la llegada del primer autobús, un joven le pide que vigile su maleta, con la mala fortuna de que el primer autobús llega antes de que el joven regrese y Allan se sube sin pensarlo dos veces, con la maleta ajena a rastras. Aún no sabe que el joven es un criminal sin escrúpulos y que la maleta contiene muchos millones de coronas. Pero Allan Karlsson no es un abuelo centenario cualquiera (a lo largo de su vida ha coincidido, en una sucesión de hilarantes encuentros, con Franco, Stalin o Churchill; además, ayudó a Oppenheimer a crear la bomba atómica, fue amigo de la esposa de Mao y agente de la CIA, siempre fiel a su absoluto rechazo a dogmas e ideologías). Esta vez, en su enésima atropellada aventura, cuando creía que con su jubilación había llegado la tranquilidad, está a punto de poner todo el país patas arriba.

Mi opinión

Como os pasará a muchos de vosotros yo acostumbro a dejar libros (normalmente a quien me los presta) pues resulta que al abuelo que saltó por la ventana lo preste tantas veces que al final no sé por cuantas manos pasó hasta que por fin pude alojarlo en mi estantería y lo más curioso es que el protagonista también viaja dentro del libro. Así que en esta ocasión contare con la colaboración de la primera persona que lo leyó y la principal culpable de que este libro haya dado tantas vueltas, mi hermana.

Allan Karlsson nunca había pensado las cosas antes de hacerlas por eso cuando le vino la idea a la cabeza abrió la ventana y se largó sin más justamente el día en el que se celebraría su cien cumpleaños en el salón del geriátrico con la asistencia del alcalde y la prensa local. Tampoco se lo pensó mucho a la hora de llevarse una maleta en la estación de autobuses a partir de ahí empezara un viaje extraordinario donde el protagonista como se suele decir es todo un personaje al que no le gusta la política ni la religión pero que sin proponérselo termina metido en algún lio relacionado con estas dos cuestiones y que nunca rechaza una copita de aguardiente.

Pero este abuelo centenario no estará solo en sus aventuras después de escaparse del geriátrico conocerá a unos cuantos “compinches” Julius ladrón y estafador, Benny propietario de un puesto de salchichas, Gunilla alias la Bella Dama, Sonja, la banda “Never Again” o el comisario Aronsson. Por otra parte a partir del nacimiento del señor Karlsson haremos un recorrido por la historia del siglo XX donde aparecen personalidades como Oppenheimer, el presidente Truman, Mao Tse-tung, Chiang Kai-shek, Franco, Winston Churchill, Stalin etc …

Parecía que todo lo que nos llegaba del norte de Europa era novela negra pues este sorprendente libro, que también viene de esas frías tierras, ha resultado ser una entretenida lectura veraniega donde el autor combina un lenguaje sencillo con un peculiar sentido del humor a la hora de narrarnos tanto las situaciones inverosímiles por las que pasan Allan y compañía como algunos de los acontecimientos más famosos de la historia. Aunque me ha gustado más la parte del presente que la del pasado y no me he reído tanto como creía os lo recomiendo sobre todo por el personaje de Allan Karlsson un abuelo buscavidas que no se mete con nadie al que le dan igual las ideas políticas o religiosas y que a pesar de tener cien años quiere vivir un poco más la vida.

Os dejo una de las frases más curiosas. Un saludo y buenas lecturas.

“…. Volvió la cabeza y echó un último vistazo a la residencia de ancianos, que hasta hacía muy poco había considerado su última morada en la tierra, y se dijo que eso de morir bien podía hacerlo en otro momento y otro lugar.”

El autor

Jonas Jonasson nació en 1962 en Växjö, una pequeña ciudad del sur de Suecia. Tras una larga carrera como periodista, consultor de medios y productor de televisión, Jonasson decidió empezar una nueva vida y redactar la novela que llevaba años queriendo escribir. Se instaló entonces en Ponte Tresa, una pequeña ciudad junto al lago de Lugano, en Suiza, donde escribió El abuelo que saltó por la ventana y se largó. En la actualidad, Jonasson vive en Suecia, en una pequeña isla en el mar Báltico.