De
poco le servirá su poder al temido magnate estadounidense Sigsbee Manderson
cuando el jardinero de su finca en la campiña inglesa lo encuentre muerto de un
disparo... El pintor y detective aficionado Philip Trent, que sigue con
entusiasmo el caso a través de los periódicos, descubre con su atenta lectura
algunos detalles del crimen que parecen habérsele pasado por alto a las
autoridades: ¿por qué no llevaba la víctima su dentadura postiza? ¿Y cómo es
que su joven y bella viuda parece tan aliviada por la tragedia? A pesar de lo
descabellado de algunos de sus razonamientos y de un inesperado interés
romántico, la apasionada entrega de Trent al arte de la deducción conseguirá
desvelar lo que nadie esperaba que alguien como él fuese capaz de encontrar: la
verdad.
La
obra maestra de Bentley, fruto del hartazgo que causaba en él la infalibilidad
de Sherlock Holmes, marcó el comienzo de la modernidad en el género con un
memorable protagonista cuyo encanto reside, precisamente, en su capacidad para
reírse de sus propios errores, mientras avanza con jovialidad por una de las
más ingeniosas tramas que el lector pueda recordar.
Mi opinión
Hoy
os traigo la reseña de una novela clásica de detectives que últimamente se ha
recuperado y que tenía ganas de leer desde hace tiempo.
Philip
Trent se encontraba pintando un cuadro cuando lo llaman del Record, el
periódico con el que colabora habitualmente como detective aficionado, para
contarle que han encontrado muerto de un disparo al magnate de Wall Street Sigsbee
Manderson. A Trent no le hace ninguna gracia que lo molesten mientras pinta
pero al final lo convencen para que vaya a la campiña inglesa a investigar el
crimen.
Una
vez allí ira descubriendo que aunque todo apunte a un suicidio las pistas lo
llevan a pensar en que se trata de un caso claro de asesinato.
El
protagonista de este libro es Philip
Trent, un pintor metido a detective
aficionado al que le gusta recitar citas y poemas. Para él resolver
crímenes es una especie de divertimento y eso lo sabe el director del periódico
que lo tienta con un misterio difícil de resolver.
En
sus averiguaciones estará acompañado por su amigo el señor Cupples y el
inspector Murch, quienes le echarán una mano con este enrevesado caso. Un caso
en el que a pesar de la larga lista de enemigos que tenía Manderson, Trent se
centra en el entorno más cercano del millonario, su viuda, sus secretarios
personales y el servicio doméstico. Todos ellos estaban en la casa en el
momento de la muerte y, como no podía ser de otra forma, todos son sospechosos.
A
lo largo de la historia veremos como Trent
elabora distintas teorías que lo llevan a equivocarse más de una vez pero, gracias a su instinto y tenacidad,
terminará por esclarecer el crimen de la manera más inesperada.
Una
vez más he vuelto a disfrutar con este tipo de novelas de detectives que cuentan
con un investigador aficionado como protagonista para resolver un crimen
donde nada es lo que parece. Un
saludo y buenas lecturas.
El autor
E.C. Bentley (nombre completo Edmund Clerihew Bentley , 10 de julio de 1875 - 30 de
marzo de 1956) fue un famoso novelista y humorista inglés e inventor del
clerihew , una forma irregular de versos humorísticos sobre temas biográficos.
Estudió
en el St. Paul School y trabajó en el Daily News y el Daily Telegraph. La
secuela de El último caso de Philip Trent (1913), Trent’s Own Case, no vería la
luz hasta veintitrés años después.
No me convence mucho. Me acaba cansando tanta teoría y me da la sensación de que hablan demasiado.
ResponderEliminarSaludos
Hola guapa, qué casualidad ahora mismo estoy con él. Jeje...
ResponderEliminarUn besazo
¡Me encanta! Autor, personaje y género me chiflan, es el tipo de lecturas que más disfruto 😊
ResponderEliminarBesitos preciosa 💋💋💋
Yo voy poco a pico haciéndone con las novelas de esta colección de Siruela, la semana pasada cayeron dos. Este no lo tengo todavía.
ResponderEliminarBesos
Me encanta esta colección de Siruela.
ResponderEliminarBesos.
Lo anoto para echarle un ojo, no lo conocía.
ResponderEliminarBesotes
Lo estoy leyendo precisamente ahora así que no puedo comentar mucho, pero ya se tiene que dar muy mal para que no me guste. Hace unos meses lo reseñó mi compi de blog y le encantó.
ResponderEliminar¡Besote!
No suelo leer muchas novelas de detectives pero esta tiene muy buena pinta. Además, nunca viene mal acudir a los clásicos.
ResponderEliminarBesos
hola guapa
ResponderEliminarHace tiempo que no leo una novela de detectives y lo cierto es que El último caso de Philip Trent tiene muy buena pinta
Me gusta que nada sea lo que parece
Un besazo