La
contraportada
Este
libro confirma algo que muchos intuyen: la vida, en realidad, se
lleva en los bolsillos. Desde la billetera hasta las llaves de casa,
pasando por servilletas olvidadas o una dirección escrita en un
papel muy arrugado, los objetos que hay en los bolsillos tienen el
poder de delatar incluso a los más reservados. Un inventario
personal y por lo tanto caprichoso en el que se suceden sorprendentes
postales cotidianas, un auténtico gabinete de curiosidades dedicadas
a celebrar la vida privada de objetos comunes y corrientes que de tan
cercanos se confunden con la propia biografía.
Gonzalo Maier
(1981) ha publicado Material rodante y Leyendo a Vila-Matas.
Mi
opinión
Hoy
os traigo la
reseña de un
libro muy curioso que
nos habla de la vida a través de lo que guardamos en los bolsillos.
Objetos
tan variados
como mapas del tesoro,
folletos de publicidad, servilletas, caramelos, libros, llaves,
cartas, serán los protagonistas de recuerdos
de
infancia, algún encuentro casual, un funeral, un viaje, amistades o
amores. Experiencias alrededor de estos
objetos que el autor narra en pequeños relatos. Como
por ejemplo en el titulado Servilletas
donde alguien que guardaba servilletas hasta en los bolsillos del
pijama las termina usando como marcapáginas. En Walkman,
relaciona este aparato con el placer de bailar con uno mismo. En
Llaves
de casa
reflexiona sobre el comienzo y el final de las relaciones.
También hay una historia muy cortita sobre las Monedas,
otra con los Números
para hacer cola,
otra
que habla
de la Esperanza.
Y
muchas más, unas narradas de manera cercana y sencilla, otras de
forma más evocadora y poética.
No
recuerdo como llegué a este título, si me llamó la atención por
una reseña positiva o porque leí su argumento
y como me gustan los relatos lo encargué en la librería, el caso es
que ha
sido todo un descubrimiento.
Una lectura
dedicada a los pequeños
detalles,
a las historias
cotidianas que pasan desapercibidas
a medio camino entre un diario personal y un cuaderno de viaje. Una
colección de vivencias que nos recuerda inevitablemente las
nuestras. Vivencias que se pierden en la memoria y el tiempo. Un
saludo y buenas lecturas.
El
autor
Gonzalo
Maier (Talcahuano, 1981) es un escritor, columnista y académico
chileno. Ha sido catalogado por la crítica como "el secreto
mejor guardado de la literatura chilena reciente". Su literatura
ha sido descrita "como un lugar de resistencia, de libertad, de
un juego imposible". Ha publicado El
destello,
Leyendo
a Vila-Matas, Material
rodante, El libro de los bolsillos, Hay un mundo en otra parte, Otra
novelita rusa, Leer y dormir.
Hola Rocío, por un lado lo encuentro muy curioso y me parece muy original. Por otro, no sé yo si relatos tan cortos me llamarían la atención, tendré que madurarlo. Me alegro de que lo hayas disfrutado.
ResponderEliminarUn besazo
Pues me resulta muy curioso este libro. No me importaría leerlo si se cruza en mi camino.
ResponderEliminarBesotes!!!
Que libro más curioso, este se lo voy a coger a mi mujer que le encantan este tipo de libros. Gracias por darme la idea.
ResponderEliminarMe parece un libro muy curioso, no descarto leerlo! Gracias por enseñarnoslo! Un besote!
ResponderEliminarPues tiene muy buena pinta y un planteamiento muy original. Los objetos guardados en los bolsillos podrían contar muchas historias de todos nosotros.
ResponderEliminarUn beso.
Hola, yo en los bolsillos suelo llevar poca cosa, pero el bolso lo tengo lleno siempre con todo lo que creo puedo necesitar. El libro me parece interesante por su planteamiento tan original. Tomo nota. Un abrazo.
ResponderEliminarHola. La verdad es que no soy de guardar nada en los libros salvo a veces el marcapáginas que he usado pero me gusta la idea sobre todo cuando compras libros usados de encontrar cosas dentro. También me gustan los buenos relatos cotidianos así que me apunto.
ResponderEliminarEs un libro que tiene un punto extra para los lectores porque también habla de libros en cierta manera.
Besos
Hola Rocío!! ME dejas con muchas ganas de darle una oportunidad a esta novela, anotado queda. ¡Gran reseña y gracias por el descubrimiento! Besos!!
ResponderEliminarBuenas tardes, Rocío.
ResponderEliminarQué curioso el título que nos traes hoy. Es un tema que jamás se me hubiera ocurrido. Sin embargo, cuando un escritor conoce bien su oficio puede escribir sobre cualquier motivo insólito y ofrecer al lector una pieza de interés. Tomo nota del libro. Gracias por dármelo a conocer!!
Un saludo.